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Bien podría retomar este espacio con un «Cómo sí escribir» según Drácula de Bram Stoker, pero eso sería demasiado ensayístico para un libro de este tipo. El vampirismo en la literatura no comenzó con Stoker; hay referentes magistrales como Carmilla de Sheridan Le Fanu publicada en 1872 y que recomiendo con toda la vehemencia que me es posible. El mito vampírico es antiguo y está arraigado, y sin embargo creo que hay un motivo por el cual este Drácula es y será el vampiro definitivo, quizá la historia vampírica más impactante y atemporal de todas. Así pues, ¿dónde reside su poder? Aquí el libro, de la editorial Akal La edición que he leído con prólogo y notas de Leslie Klinger, muy alabada y sin duda muy cuidada, destaca por una proliferación de anotaciones que explican, elucubran y analizan elementos de la novela como los espacios reales, los tiempos, los ciclos de la luna o los tratamientos médicos; incluso si tal decisión es acertada o no, o si este personaje se equivoca en su diar